jueves, 17 de julio de 2014

El volcán

Lo había vivido tres veces y se lo dije a  mi  director (el de secundaria). En eso debajo de un arbol japones, de aquellos que parecen llorar, al florear vi un hipogrifo (cachorro) que se reverenciaba al hincarse con una pata adelante de el y con la otra atrás. Yo sabía que me escogía y que era mio. Lo miré emocionada. Acercó su pico al piso y se lo quita. En ese momento estuve segura de un pensamiento, en el momento que su pico sanara sé que podría enseñarle. Después tenía que regresar a pintar así que le dije a un compañero de secundaria (Meme) que no haré un búho de nuevo.
Paso por un pasillo idéntico al de mi casa con mi cuadro en la mano y no sabía que pintar. Me dice Meme que "ya alguien está haciendo un búho como quiera así que la idea estaba descartada". Me quedé pensando y en eso veo unos cuadrados de la misma persona que pintó vacas. Cuatro o cinco vacas un poco abstractas. Después me voy, y se abre el espacio. Vamos a pasar un puente. No está pavimentado y veo a mi amigo Diego y lo abrazo y le digo que me acompañe o yo le digo que lo acompaño. Pasamos el puente y hay una llanura o planicie rocosa chaparra perfecta para sentarnos y frente a esta está un volcán dormido. 
Miro al frente y el anochecer se ve rojo y es muy bello. Así que nos quedaremos a verlo Hugo, Pato, Cary y yo. En eso digo:"Wow. Ha pasado mucho en un año".  "Hace un año Cary no estaría aquí". Desaparece y Pato dice:  "Que aburrido solo nosotros aquí".  Y le digo "Sí", y aparece de nuevo. Y pienso en que sería una buena idea invitar a Adrian a ver el volcán conmigo, si es que me atreviera y en eso veo a Hugo atrás. Muy atrás como si estuviera sentido. Fue raro yo solo pensaba: "¿Por qué no venia si entre los cuatro nos acompañamos bien?" No lo pensé más y me senté a ver el volcán dormido con el rojo anochecer.


(20 de mayo de 2014)


FPSA

Golpe

Tan pronto.
Tan cerca.
Tan lejos,
Todo a la vez

Tus pasos.
Los míos.
Se entrelazan como la arteria,
y se alejan poco a poco.

No es una constante,
la vida.
Son hierbas que crecen,
que mueren.

Tantos enemigos,
que son las circunstancias.
Es bueno ignorarlas,
y a la vez ser consiente.

Ahí es cuando te golpea la vida,
pero no te la arrebata.
El cuerpo fue más fuerte,
por vivir en tu virtud.


(17 de julio de 2014)

FPSA